lunes, 14 de enero de 2008

Julia sonreia

"Julia se incorporó lentamente del piso, había estado inconsciente, no sabía cuanto tiempo. Sentía mucho dolor y los golpes en su piel ya comenzaban a evidenciarse, como tantas otras veces. Miró el reloj en la pared, era de madrugada.
A duras penas se dirigió al baño para lavarse un poco y luego se iría a la cama. Todo era como siempre, la misma rutina...Mario seguramente ya estaba acostado, ebrio, profundamente dormido.
Al día siguiente; a solas; nuevamente el llanto, la amargura, la impotencia de no poder hacer nada.
-Dejalo- le decian sus amigas
-¿cómo podés vivir así?- decía su madre
Pero...ella inexplicablemente lo amaba y no lo dejaría solo. Además esa era su casa, su hogar...¿adonde iría?.
Buscaba, pensaba, rogaba que esa noche él viniera en buen estado.
-Cuando no bebe es cariñoso- se decía- y me mima y me pide perdón-.
Así pasaban los días de Julia entre miedo, compasión, amor/odio y resignación
Su amiga la visitó en aquella ocasión y le dio la idea- ¡Hechalo, que se vaya!- dijo...
Ella nunca había contemplado esa posibilidad...
¡Si! eso haría, haría que se fuera, haría de cuenta que no existía...y sonrió, sonrió, sonrió como no había sonreído en mucho tiempo.
Mario llegó esa noche, muy cansado, más de lo acostumbrado, apenas dirigió algunas palabras a Julia y se fue a dormir...estaba agotado.
Ella repetía en su mente- no existe, no está- y sonreía.
En la obra, aquella mañana, los obreros estaban muy asustados. Todo había ocurrido delante de sus ojos y ellos habían sido testigos de como Mario muy lenta y misteriosamente había ido desapareciendo de la vista de todos hasta esfumarse por completo.
A Julia se la puede ver en todos los rincones de su casa sonriendo, sonriendo, sonriendo..."

First Kiss


"-Cerrá los ojos - te dije, y enmarqué con mis manos tu rostro.
Lentamente comencé a besar cada centímetro de tu piel, eran besos sutiles, suaves, llenos de ternura, casi imperceptibles pero tiernos y sensuales a la vez. Así beso a beso fui recorriendo tus mejillas, tu frente, tus ojos ,tu mentón...hasta llegar a la comisura de tus labios...primero la izquierda luego la derecha...para quedarme inmóvil en el centro de tu boca y, a milímetros de tus labios respiré...suspiré...Muy , muy lentamente mis labios fueron abriendo los tuyos y nuestras bocas se fusionaron con pasión, con deseos, agitadas...y así nos quedamos abrazados besándonos, besándonos, besándonos..."